CON LA MEDICINA ESTÉTICA DILE ADIÓS A LA PSEUDOFOLICULITIS O VELLOS INFECTADOS
La doctora Carmen Beltrán dedica el artículo de junio a los hombres, a propósito del Día del Padre, mencionando algunas recomendaciones de la Medicina Estética para evitar y/o solucionar uno de los problemas que afecta principalmente a la población masculina: la pseudofoliculitis.
La Pseudofoliculitis es la inflamación del folículo piloso, la cual puede llegar a evolucionar hasta la infección (Foliculitis o Abscesos). Esta es una afección ocurre en cualquier localización donde exista pelo terminal.
Este tipo de lesión es más frecuente en personas con gran densidad de pelo grueso, duro y rizado, con tendencia encurvarse y por ende, a incrustarse en la piel, por lo tanto, es frecuente en los hombres, sobre todo en los de tez oscura.
Se caracteriza por la erupción primaria de múltiples puntitos rojos, inflamados y pruriginosos (pican) en las áreas donde hay pelos que, en algunos casos, van a una fase secundaria donde aparece pus y/o ampollas. Sus causas pueden ser de origen microbiano (Estafilococos, Pseudomonas y Pityrosporum); o químico. También pueden ser irritativos, es decir, ocasionados por la acción de agentes físicos, como el rasurado y excoriaciones (raspadas). También es común encontrarlas en personas con trastornos hormonales, sobre todo de Insulina y Cortisol.
Si bien, podemos verla en cualquier área del cuerpo provista de vello o pelo, las zonas más afectadas son la barba, axilas, espalda, ingle, tórax (pecho) y piernas.
Esta afección produce un distrés emocional que se traduce en afectación de la autoestima por dar un aspecto de poca pulcritud o limpieza. Además, dependiendo de la intensidad y cronicidad de las lesiones, pueden quedar verdaderas manchas y cicatrices profundas.
OPCIONES TERAPÉUTICAS
Cuidados al rasurar:
- Hidratar bien el pelo, humedeciéndolo con agua tibia y utilizar lociones, cremas o espumas pre-afeitado, dejándolas actuar por 3-5 minutos antes de rasurar.
- Rasurar en el sentido de la salida del pelo (nunca a contra pelo).
- Evitar afeitarse apresuradamente.
- Espaciar las sesiones de rasurado.
- Usar productos antisépticos al culminar, así como cremas o geles que contrarresten la inflamación o irritación.
También se debe recordar:
- Usar diariamente productos queratolíticos (ácido salicílico, glicólico, adapalene, mandélico, etc.) que reblandezcan el orificio de salida del pelo, reduciéndo el traumatismo.
- Emplear dermolimpiadores (no jabones comunes) que respeten el pH de la piel. Para las pieles sensibles son ideales los Syndets.
- Exfoliar la zona con frecuencia (1-2 veces por semana) con cremas granuladas (scrubs) o guantes de crin.
- Hidratar la piel para mantenerla flexible y permitir la salida del pelo sin traumatismos.
- En algunos casos, deben utilizarse antibióticos locales o vía oral para controlar la infección.
- Cambiar los productos usados en caso de tratarse de una irritación química.
¿Qué hacer cuando las medidas convencionales fracasan?
La técnica que ha aportado verdaderos resultados positivos, de forma contundente, es conocida como FOTODEPILACIÓN O DEPILACIÓN LÁSER. Esta técnica ha revolucionado la historia de la pseudofoliculitis, porque:
- Disminuye o suprime el componente inflamatorio.
- Controla la infección, ya que elimina los gérmenes implicados mediante efecto calórico.
- Disminuye el grosor y la dureza del vello.
- Aminora la densidad (cantidad) de vello pudiendo llegar a la eliminación en su totalidad y, “sin pelo, no hay lesiones”.
Los láseres más utilizados para tratar esta afección son los de Neodimio-yag de pulso largo, Diodo y, Alexandrita (para pieles muy claras). Debe realizarse 1 sesión cada 3 a 4 semanas con un mínimo de 4 sesiones hasta 10 sesiones, para una eliminación total y definitiva.
Para realizar este tipo de tratamientos se debe acudir a un centro donde el paciente sea evaluado previamente por un médico especialista para descartar otras patologías y evitar quemaduras u otras lesiones.
